Lavatorio Acero Quirúrgico

El aseo diario es una parte fundamental de la atención a pacientes postrados. Es importante mantener la piel limpia y seca para prevenir infecciones y mejorar el confort del paciente.

En el pasado, los lavatorios de loza, cerámica o cristal eran la opción más común para el aseo de pacientes postrados. Sin embargo, estos materiales son frágiles y pueden romperse con facilidad. Además, pueden acumular moho y bacterias, lo que representa un riesgo para la salud del paciente.

El lavatorio de acero quirúrgico es una alternativa más segura y duradera. Este material es resistente a la corrosión y al moho, lo que lo hace ideal para un entorno hospitalario. Además, es fácil de limpiar y desinfectar, lo que ayuda a prevenir infecciones.

Beneficios del lavatorio de acero quirúrgico:

El lavatorio de acero quirúrgico ofrece una serie de beneficios, incluyendo:

Resistencia: El acero quirúrgico es un material muy resistente, por lo que es menos probable que se rompa que los lavatorios de loza, cerámica o cristal.
Durabilidad: El acero quirúrgico es un material duradero que puede soportar el uso intensivo.
Facilidad de limpieza: El acero quirúrgico es fácil de limpiar y desinfectar, lo que ayuda a prevenir infecciones.
Higiene: El acero quirúrgico es un material higiénico que no acumula moho ni bacterias.

El lavatorio de acero quirúrgico está indicado para una variedad de procedimientos de aseo de pacientes postrados, incluyendo: